Terrenos ejidales: ¿opción de inversión segura?

Hoy es esencial que estés bien informado y asesorado antes de invertir en terrenos. Por tal motivo, es imprescindible que conozcas qué es un terreno ejidal, evaluar si representa una inversión segura y en qué se diferencia de una propiedad privada, según Landrada. 

Los terrenos ejidales son aquellas tierras que fueron otorgadas por el Estado para realizar actividades agrícolas o ganaderas. Por tanto, esta extensión de terreno es propiedad del municipio donde se encuentra y es administrado por tres órganos jurídicos: la Asamblea Ejidal, el Comisariado Ejidal y el Consejo de Vigilancia.

Los terrenos ejidales surgieron en la época de la Revolución Mexicana, cuando las extensiones de tierra fueron repartidas entre campesinos para que cultivaran. Sin embargo, por tratarse de tierras otorgadas por el Estado no poseen un dueño ni cuentan con escritura de propiedad: pertenecen al Gobierno Federal. 

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Por consiguiente, un terreno ejidal no es una opción segura de inversión porque le pertenece al Gobierno y termina siendo una propiedad federal. De igual manera, existe un proceso de regularización para transformar un ejido de un terreno en una propiedad privada. En Landrada estamos empeñados en brindarte la mejor información y asesoría en pro de una inversión segura con certeza legal. 

¿Qué es un terreno de propiedad privada?

Un terreno de propiedad privada es aquel que pertenece a un solo dueño, que cuenta con las escrituras del inmueble a su nombre, puede hacer uso de la propiedad como mejor le parezca y tiene el poder absoluto para vender, rentar o heredar el bien inmueble. 

Algo característico a los terrenos de propiedad privada es que todo el proceso de compra y venta es legal y avalado por un notario público. Recuerda que para que una propiedad sea declarada es necesario inscribir las escrituras en el Registro Público de la Propiedad. 

Diferencias entre terrenos de propiedad privada y ejidales

Existen 3 diferencias claves que te ayudarán a identificar si te están ofreciendo un terreno de propiedad privada o ejidal. Arriba quedaron claras, pero es bueno retomarlas para que no tengas dudas.

Inscripción en el Registro Público de la Propiedad

Mientras que un terreno de propiedad privada cuenta con una Registro Público de la Propiedad, que incluye un tablaje y una escritura de propiedad, el ejidal solo cuenta con un certificado parcelario: precisamente porque no tiene dueños, sino posesionarios. 

Tipo de propietario

El dueño de una propiedad puede hacer lo que quiera con su inmueble: rentarlo, venderlo… Por su parte, un terreno ejidal no pertenece a una persona por tratarse de una propiedad federal. 

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Proceso legal de la compra

Para que una propiedad privada sea declarada como tal es necesario llevar a cabo el trámite ante el Registro Público de la Propiedad, de lo contrario no puede venderse o heredarse. Además, la propiedad privada se adquiere a través de la escrituración, mientras que el ‘dueño’ de un ejido solo tiene el derecho de ceder las tierras a otros ejidatarios; pero no puede venderlas. 

En Landrada puedes tener la confianza de que nuestros desarrollos cuentan con certeza legal. Además de ser propiedad privada, se encuentran libres de gravámenes, por lo que asegurar tu futuro será fácil. Ya sea que desees invertir en lotes ecoturísticos o construir tu casa cerca de la playa, nuestras opciones siempre te garantizarán ceros problemas legales. ¡Sueña en grande de la mano de Landrada e invierte en la Península de Yucatán!

Acércate a unos de nuestros asesores inversionistas, quienes te guiarán en todo proceso para realizar una inversión inteligente, segura y con conciencia. 

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